La Iglesia católica en México tiene 101 casos de pederastia

En 64 de las 95 Diócesis que hay en el país, se tiene registro de 101 casos de abusos sexuales cometidos por clérigos denunciados ante el Ministerio Público, los cuales se han presentado de 2010 a la fecha.

Así lo indicó la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM). Al presentar los resultados del Encuentro de Protección de Menores, realizado en El Vaticano, Rogelio Cabrera López, Presidente de la CEM, detalló que se está recabando la información en las diferentes Diócesis país para conocer más directamente los casos que se han reportado y cuántos de ellos han sido denunciados ante las autoridades civiles.

El también Arzobispo de Monterrey aclaró que la Nunciatura Apostólica le informó al Episcopado Mexicano que en los últimos nueve años, 157 sacerdotes han sido suspendidos de su ministerio por presunto abuso sexual.

 Investigación exhaustiva

Alfonso Miranda Guardiola, Secretario General del Episcopado Mexicano, comentó que al no tener información sobre este delito, se inició una investigación con las Diócesis en las que se solicitó a los Obispos información de los casos que se han presentado y cuáles ya están en proceso ministerial.

Explicó que tras el encuentro efectuado en la Santa Sede del 21 al 24 de febrero, el Episcopado Mexicano diseñó una estrategia para combatir el problema.

Toman medidas

Entre las medidas a asumirse figura el realizarse pruebas sicológicas a los Seminaristas, así como certificar a los Sacerdotes, Obispos y Parroquias para prevenir los abusos sexuales contra menores. Resaltó que se establecerán comisiones en todas las Diócesis de protección de menores para el 2019-2020, además de que se actualizarán las líneas guía de los protocolos de actuación en caso de presentarse algún abuso sexual. Serán difundidos en todas las instancias de la Iglesia católica a fin de generar “ambientes seguros” para los menores de edad.

Petición del Papa

Cabrera indicó que el Papa Francisco pidió cambiar el paradigma y ponerse siempre del lado de las víctimas, por lo que la postura de la Iglesia católica en México será la de informar los casos que se presenten, establecer las medidas cautelares como es la suspensión de los clérigos involucrados y denunciar ante las autoridades civiles los hechos.

 

 

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