Domingo 27 de junio de 2021.
Se nos presenta en el evangelio de San Marcos después de la tempestad calmada, dos milagros de Cristo. La resurrección de una niña de 12 años, hija del jefe de la Sinagoga llamado Jairo y la curación de una mujer que tenía flujo de sangre desde hacía 12 años y se gastó todo su dinero y nadie la pudo curar, tocando con fe solo el manto de Cristo.
Jairo se hincó, le suplicó a Cristo que le curara a su hija, ya se encaminaba cuando llegó un criado a decirle a Cristo: la niña está muerta. ¿Para qué molestas al maestro? Pero Cristo sacó a relucir la fe, que con esa basta para obtener lo que quieras, milagro más difíciles que la gente tenga fe, por lo que veo muchos sacerdotes le tienen más fe al dinero que al poder de Dios. Es lo que más procuran, incluyendo a algunos obispos.
Cristo los regañó por tanto alboroto de flautas y plañideras. Le dice Talitá Kum en hebreo:“Levántate niña”, y se levantó y se puso a caminar.
Hace un año después de celebrar la misa de Fray José Pérez en Cacalote, municipio de Tarimoro Gto., mártir asesinado el 2 de junio de 1928 estando comiendo unas gorditas con una docena de testigos, se presentó un joven de 22 años con su esposa y una niña de 3 años a darnos las gracias porque se encomendó a las oraciones del Padre Pistolas. Su mamá de 50 años, padecía de sangrado de vagina y estaba desahuciada por los médicos, se metieron al templo de la Noria de Gallegos a rezar y otro día su madre se alivió.
Los mexicanos tenemos una sensibilidad única acerca de la muerte, convivimos con ella, componemos poemas en honor a la Parca y para ponernos a arreglar calaveras, la celebramos cada día 2 de muertos. Percibimos la muerte no como el límite de la vida o como una catástrofe, sino como otra manera de existir.
Cuando echa uno las redes hay peces buenos y peces malos, no todos los jefes de los hebreos eran malos o enemigos de Cristo. El espíritu santo es el dueño y el dador de vida y el que sana a los enfermos, lo mismo el poder que salió de Cristo a la enferma de hemorragias, Cristo lo notó a pesar de tanta gente, esta mujer no quería decirle a nadie por ser considerada impura e impedida de asistir al templo.
Cristo hizo al hombre inmortal, fue creado para la vida pero la muerte entró al mundo por el pecado y por envidias del demonio. San Pablo exhorta a los Corintios que se habían distinguido de buenos cristianos para hacer una colecta para los cristianos de Jerusalén, siguiendo el ejemplo de Cristo que se hizo pobre y viniendo al mundo desde el cielo.
Comentario de buen humor:
Doctor, no quede bien de la operación.
Hijo, fue por exceso de vino
“Doctor, pero si yo no tomo”.
Pero yo si tomo, hijo.
¡Que Dios los bendiga!.
El Padre Pistolas reitera que en todo momento “la fe, mueve fronteras”
Alfredo Gallegos destaca que “Dios es dador de vida, a favor del hombre”