Domingo 03 de mayo de 2020…
Cada año se nos presenta en este domingo la figura de Cristo como el buen pastor, aunque en este tiempo los obispos y sacerdotes solo les gusta los borregos en barbacoa en su mesa, es una figura universal y siempre actual, así como también para gobernantes y padres de familia.
La vida de los judíos en tiempo de Cristo dependía mucho de los corderos por su geografía, pedregada, desértica con pocos pastos, poca agua prácticamente sin agricultura, salvo algunos trigos, viñedos y huertas.
Peligros para el rebaño y pastores:
- Desbarrancarse
- Lobos
- Hienas
- Leones
- Ladrones
- Con quienes peleaban los pastores muchas veces a muerte con un garrote o callado
Ventajas de los corderos:
- Dan lana para hacer ropa
- Leche y queso
- Pieles para calzado y abrigos
- Carne muy sabrosa
En México para indicar que la gente es manipulada, o es muy dócil o no es crítica, pero este no es el caso, se le llama aborregada.
La diferencia entre un buen pastor, obispo, sacerdotes, político o padre de familia o unos malos, son los siguientes:
El buen pastor:
- Conoce a todas las ovejas
- Las llama por su nombre
- Las lleva a buenos pastos
- Entra por la puerta
- La defiende con su propia vida
- Busca a la oveja perdida
Defectos de los malos pastores:
- No convive ni le interesa la vida de los fieles, de los gobernantes o de los hijos.
- Lejos de buscar el bien de la comunidad, busca su propio bien y es aprovechado.
- Promete y no cumple, miente a los gobernados en caso de los sacerdotes predican con un lenguaje rebuscado, monótono, duerme a la gente y no aporta nada nuevo porque no hace nada y ni practica ninguna caridad.
No defiende a sus gobernados, por el contrario, se junta con los sicarios por dinero o por miedo bajo las amenazas.
En caso de sacerdotes, los fieles ni siquiera se aprenden el nombre del párroco porque no reciben ningún apoyo de él.
Los padres de familia, lejos de apoyar a la hija, madre soltera o divorciada, la corren exponiéndola a la prostitución.
Si somos caritativos, justos y amables con nuestro prójimo no nos hace superiores a los demás.
En esta parábola cuenta mucho la voluntad de las ovejas, que no solo conocen la voz del pastor, sino que también lo obedecen, cosa que no sucede entre nosotros, porque seguimos de borrachos, ladrones, adúlteros, mentirosos y sin acudir al templo, no somos despiadados.
En Jerusalén había la puerta de las ovejas por donde pasaban las ovejas que iban a ser sacrificadas, pero Cristo dice: yo soy la puerta verdadera porque él mismo era el único que se iba a sacrificar por nosotros en la cruz.
San Pedro y Juan fueron encarcelados, torturados y amenazados, sin embargo Pedro les reprocha al pedir la muerte de Cristo y la liberación de Barrabás, cuando Pilatos ya lo había declarado inocente y bautizó a 3000 judíos ese día y le preguntan: ¿Qué debemos hacer? Y Pedro le contesta lo mismo que el Papa nos pide: confiésense y conviértanse.
Comentario de buen humor:
Padre Pistolas, con eso de la Susana Distancia de 1.50 metros, ¿verdad que no va haber nacimientos de niños?
Al contrario hijo, ahora va a ver más que nunca, con eso de que todo el día están en casa. A ver si el gobierno nos ayuda a pagar la luz y el teléfono.
¡Que Dios los bendiga!.
Alfredo Gallegos pugna por una buena orientación del “rebaño de Dios”
Sin perder el humor, el Padre Pistolas pide a los cristianos que se confiesen