Los dedos de los pies morados e hinchados fueron de los primeros síntomas en detectarse, allá por febrero, entre los contagiados con SARS-CoV-2. Luego llegaron los testimonios de la llamada “niebla mental” y cansancio que se ve eterno. Ahora, parece, son los dientes los que pagan el precio por la enfermedad COVID-19.
Varios pacientes han reportado problemas dentales a las autoridades sanitarias, tras recuperarse de la enfermedad. Entre los más comunes, se ha mencionado la pérdida de dientes, cambios de color en los mismos y encías más sensibles, informó el periódico The New York Times.
Quienes han experimentado la caída de dientes aseguran que sucede sin sangre y sin dolor. Mientras que otras personas únicamente han reportado un aumento de la sensibilidad en sus encías o que sus dientes, se están volviendo grises o astillados.
Algunos dentistas, citando la falta de datos, se muestran escépticos de que la COVID por sí solo pueda causar síntomas dentales, dice la periodista Wudan Yan. Pero los problemas dentales existentes pueden empeorar como resultado de la enfermedad, especialmente a medida que los pacientes se recuperan de las infecciones agudas y lidian con sus efectos a largo plazo.
Los dientes podrían caerse como efecto del COVID-19
Que el dolor en las encías es un síntoma del coronavirus