Se informó que los Obispos, conscientes de la urgencia de justicia, paz y misericordia, traducidas en estilos de vida digna para todos, se comprometieron a disponer de los centros de escucha y atención a personas adictas para trabajar con las víctimas de las diferentes expresiones de violencia.
A la prensa, se informó que el esfuerzo es “sin ahorrar esfuerzos para colaborar con el restablecimiento del tejido social y la reconstrucción del proyecto de vida de las personas afectadas”. Y agregan: “Nuestros esfuerzos están invitados a sumarse a la responsabilidad del Estado en procurar la justicia y, con sus políticas públicas”.
De la misma manera destacan que respaldan “la cultura de la esperanza y la paz”. En un comunicado, también se advierte que todos los actores sociales tienen la responsabilidad de aportar en la implementación de soluciones para la crisis de humanidad que afecta a la sociedad mexicana”.
Y es que la solución “corresponde a todos los actores sociales:. familia, escuela, medios de comunicación e Iglesias tienen la misión de forjar una cultura de esperanza y de paz en México”.
Los obispos se pronuncian por una adecuada impartición de la justicia
Los feminicidios son un asunto no resuelto por el Estado mexicano