Del 5 al 11 de enero, los católicos en Estados Unidos celebran la Semana Nacional de la Migración bajo el lema “Promoviendo una Iglesia y un mundo para todos”.
La finalidad es reconocer a la Iglesia como lugar acogedor y solidario con inmigrantes y refugiados. Por ello, se dijo, la actividad “es como un principio fundador de nuestro país, nosotros siempre hemos acogido a los inmigrantes y refugiados…”.
Y es que “…a través de los servicios sociales y las buenas obras de la Iglesia, hemos acompañado a nuestros hermanos y hermanas en su integración a la vida diaria en Estados Unidos!”, explicó en un comunicado reciente Monseñor Mario E. Dorsonville.
El Obispo Auxiliar de Washington y presidente del Comité de Migración de la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos (USCCB), se congratuló por el evento y ratificó que la Iglesia como institución debe estar más cerca del pueblo de Dios.
La Semana Nacional de la Migración es un éxito
Monseñor Mario E. Dorsonville se congratuló por el evento