Los miembros de la Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico) consideran que la actividad económica del país muestra una desaceleración mayor a la anticipada, con una contracción en el primer trimestre y signos de debilidad en el segundo.
En la minuta correspondiente a la última decisión de política monetaria, en la que se decidió mantener la tasa de interés en 8.25%, los miembros de la referida Junta de Gobierno destacaron que la economía mexicana enfrenta una serie de riesgos internos a la baja.
Precisan que destaca claramente “la orientación de las políticas públicas”, hoy en día basadas en una llamada “austeridad republicana” del Presidente Andrés Manuel López Obrador.
La desaceleración económica impactaría en el nivel de desarrollo social de la República Mexicana, lo que generaría que se mantenga estancada y por lo tanto, con un reducido crecimiento anual. En este aspecto, el crecimiento no ha superado el 3 por ciento.
La desaceleración económica del país afecta el desarrollo social
El poco crecimiento impacta negativamente en el sector productivo