Si bien la ultraderecha se re-hizo del poder político en Bolivia, el costo social en las últimas dos semanas no ha sido el mejor, y menos, si el Ejército y la Policía han dejado muertos en el afán de proteger a la Presidenta Jeannie Áñez.
A nivel internacional, la noticia se conoce por Agencias Informativas, o bien, a través de las redes sociales, de tal manera que los crímenes no los puede ocultar el nuevo Gobierno de corte fascista y títere que tiene Estados Unidos en la nación sudamericana.
La meta del Gobierno de hecho, pero no de derecho, es revertir las políticas públicas del Expresidente Evo Morales para favorecer a los grupos económicos que también respaldan el Golpe de Estado Técnico que se dio la semana pasada.
El cartón de José Hernández retrata muy bien lo que ocurre en Bolivia, un país que creció vertiginosamente con las políticas sociales de Morales Ayma, quien hoy está en calidad de asilado en México.
Como en los viejos tiempos de dictaduras militares, tras el Golpe de Estado vienen los crímenes en contra del pueblo